Enrique Cerezo I Imagen: Tw@Atleti-Tiralíneas Madrid
La plantilla del Atlético de Madrid cuenta con el valor de mercado más bajo de los últimos 8 años.
El Atlético de Madrid es uno de los grandes de España que habitualmente está en las fases finales de la UEFA Champions League, a la que solo llegan los mejores equipos del mundo. Este año llegaron a los cuartos de final y estuvieron a punto de clasificarse. También se quedaron a un paso de la final de la copa del rey. Lo curioso es que la actual plantilla del Atlético de Madrid tiene un valor de mercado de tan solo 417 millones de euros. Lo que es menos de la mitad de los 969 millones que alcanzaron en la temporada 2018/19.
El Atleti es el cuarto equipo con más valor del campeonato liguero. Esto se está reflejando ya que no les ha alcanzado para pelear la liga esta temporada. En Champions, de los equipos que llegaron a cuartos era el que menos valor de plantilla tenía de los 8 equipos, por debajo incluso del Dortmund que era el segundo con el valor más bajo y el cual fue su verdugo. Simeone tiene razones para afirmar que son el equipo del pueblo ya que el club está logrando un rendimiento más que satisfactorio con una plantilla que a priori no está hecha para competir contra los más grandes.
Nahuel Molina es el jugador con más valor de la plantilla
A día de hoy si le preguntas a los aficionados colchoneros sobre quién es el jugador con más valor del Atlético de Madrid, posiblemente nadie diría que sea Nahuel Molina. De hecho este jugador está recibiendo muchas críticas en los últimos meses ya que se encuentra en un mal estado de forma. No está ofreciendo el rendimiento que dio cuando se le fichó. Tampoco el que ofreció cuando ganó el mundial con Argentina y esto ha sentado bastante mal entre la afición.
Una posible venta de este jugador podría darle al Atlético de Madrid algo de dinero para realizar fichajes ya que su valor de mercado es de 35 millones. La temporada pasada fue Joao Félix el jugador más valioso aunque su rendimiento este año en el Barcelona le ha hecho caer mucho. Por este jugador el club debería intentar ganar algo ya que los 127 kilos que costó han escocido bastante. Jugadores por los que la directiva apostó y salieron mal, fracasos en Europa en los últimos años y la llegada de jugadores que ya no están en su mejor momento nos lleva al punto en el que nos encontramos. Es una pena ver como un proyecto que apuntaba para tanto está debilitándose poco a poco y la realidad es que no se sabe señalar a un culpable. Los aficionados le exigen más a su club pero tanto Simeone como la directiva se conforman con quedar cuartos en liga. Recordemos que hace 3 años los colchoneros ganaron La Liga y en la última década han llegado a 2 finales de Champions. Hace falta más ambición para un club tan guerrero y un proyecto a la altura de el entrenador mejor pagado del mundo.
Una plantilla muy envejecida
La razón principal de que el Atlético de Madrid no pare de bajar su valor de mercado es que sus futbolistas son demasiado veteranos y la edad devalúa mucho. Los jugadores de la actual plantilla son excepcionales pero muchos ya no están en su mejor momento. La renovación generacional está siendo un problema muy serio. Los rojiblancos cuentan con 24 jugadores en plantilla de los cuales solo Lino, Riquelme, Barrios y el recién llegado Vermeeren tienen 24 años o menos. Esto es un dato escalofriante. A excepción de Griezmann y Oblak, que a nivel de importancia en el juego son los más destacados, son estos 3 jóvenes (Veermeren aun no ha tenido su oportunidad) los que más ilusionan entre en la afición. Por otra parte son 11 jugadores los que superan los 30 años. Esto nos da una edad media de plantilla de 28,7 convirtiéndose en una de las más envejecidas de Europa.
Samu Omorodión el cual fue fichado a inicio de temporada y se cedió al Alavés tiene 40 millones de valor de mercado. El joven ariete de 19 años que lleva 8 goles en liga se predispone como una opción seria para el futuro del Atlético de Madrid. Desde luego harán falta jugadores jóvenes que garanticen el futuro del club y den la cara por el equipo y alegrías a la afición. No durarán para siempre las viejas glorias del equipo como Koke, Griezmann, Oblak, Saul o Giménez y el relevo generacional debe ser la prioridad. Es la hora de mirar a la directiva y pedirles que formen un proyecto deportivo que siga siendo competitivo como han logrado en esta última década.
